Lunes, 08 de Noviembre del 2004
Día D
El Día Dos empezó para mí (y richard) alrededor de las 18:30, con unos segundos de Virus, como para poder decir que los vi en vivo nomás ;), luego partimos para el escenario secundario a esperar por Kinky. Nos recostamos sobre la valla que separa a la plebe del escenario y a los 5 minutos empezamos a escuchar unos redobles de tambor, que parecían muy fuertes para prueba de sonido. La gente acercándose al escenario fue otro indicio de que alguien estaba tocando. Nos paramos y nos encontramos con Rataplán, un grupo de percusión bastante interesante y carismático. Empezaron tocando unos 5 músicos y terminaron alrededor de 16. Lo mismo pasó con el publico, que se fue acercando de a poco. Terminaros muy aplaudidos haciendo un bis.
Un rato después empezó Kinky tocando Cornman y empezó la fiesta. La verdad que esta banda es puro potencia y alegría. Lo que realmente me sorprendió fue la versitilidad del cantante, que toca la guitarra, la trompeta en Soun Tha Mi Primer Amor y las bandejas para cantar haciendo scratching en Ejercicio #16. Otra cosa que sorprende es la cantidad de estilos que fusionan y lo bien que lo hacen. Otra muy grata sorpresa, al punto de haber llegado a escuchar sólo el último tema y medio del recital de Cerati en el escenario principal sin ningún tipo de cargo de conciencia. Igual disfruté de ese pedacito de Paseo Inmoral y de Primavera Cero (tema de Soda) con el que terminó su presentación. Despidiéndose con un "Quedense a ver a Blondie que está buenísimo", no me quedó más remedio que hacerle caso =)
Sobre Blondie sólo voy a agregar que no le daba ni dos centavos y, de nuevo, terminó sorprendiendome mucho, sonó como los Dioses y parafraseando a mazzi, la vieja todavía rockea! El resto de la banda también estuvo muy bien, el batero la descocía y el tecladista le ponía onda torciendo el teclado y mostrando como lo tocaba al público, bien a lo rock star.
De Morrisey tampoco voy a agregar demasiado a lo que dijo mazzi, sólo que fue el único que no me sorprendió, porque fui con grandes expectativas y las cubrió a la perfección, realmente un tipo muy carismático y con excelente manejo del público. Incluso tocó mis dos canciones favoritas de The Smiths: How Soon Is Now? y Bigmouth. Una pena que la organización no haya podido estar a la altura de las circunstancias.
A la espera por Rinôçérôse, me fui a ver a Goran Bregovic. Duré poco porque, a pesar de que me hubiera gustado verlo como curiosidad, no podía darme el lujo de no ver por segunda vez a Rinôçérôse! :)
Se apagaron las luces, empezó a llegar la gente, el Rinoceronte francés abrió el show con todo y como si fuera poco fue creciendo a medida que pasaba el tiempo. La gente respondió muy bien esta vez (cuando tocaron en el BUE, el público estuvo bastante tímido). No faltó la flauta traversa, que le da un touch de lo más agradable. Incluso en los bises el cantante sacó una guitarra flamenca y bromeó con que le gustaba el flamenco, tocando un pequeño fragmento antes de comenzar el penúltimo tema de la intensa noche.
En fin, creo que poco más podría haber esperado de esa jornada, realmente fue alucinante, y espero que el BUE y este festival no hayan sido meros eventos aislados sino sólo el puntapié para que se repita al menos una vez al año recitales de esta naturaleza.